Me gusta seguir este tipo de noticias y atiendo a la información que conllevan, como la relativa a la viabilidad de la clonación humana, a diez años del éxito de la oveja Dolly. En ese equipo de Oregon está, como cuarta investigadora, la española Nuria Martí, despedida hace un par de años (por un ERE) del Instituto valenciano Príncipe Felipe. El mismo día que se difundía este avance científico sabíamos de lo que sucedía con el joven físico gallego (destinado en el Cern de Berna y elegido mejor investigador europeo del año) a la hora de solicitar una Beca Ramón y Cajal para regresar a España y cuyo expediente o solicitud fue rechazada por "falta de liderazgo internacional".
El jueves, la viñeta de Forges era suficientemente elocuente:
Imagino que algunos se sorprenderán, no sólo del pinchazo y del ridículo en el que incurrieron los "competentes" de turno, sino también del lenguaje, tan alejado de las ciencias y de las humanidades. Más se sorprenderían de otras frecuentes expresiones que circulan en el ámbito académico, una especie de jerga turbia y opaca, más propia del mundo de los mercados y el business, y que revela ante todo la mentalidad de una casta de gestores y burócratas que hace años está vaciando todo de sentido.
Hoy viernes leemos que sobre 3500 estudiantes de la Universidad Complutense pende la amenaza de seguir con sus estudios por dificultades económicas para abonar sus matrículas. eso sí, a los docentes de la Universidad de Barcelona (ya tercer o cuarto recorte, si sumamos administración central y autonómica), desde la nómina de abril del presente y hasta la de diciembre, se nos deduce el importe a otra paga extraordinaria.
e così la nave va...
Si con su zafia incultura "ellos" están donde están, ¿qué aprecio van a tener por la cultura? Burros como son (con perdón de los auténticos, que ninguna culpa tienen), ¿qué van a hacer más que burradas?
ResponderEliminarMientras tanto, y para suplir las carencias formativas de nuestros jóvenes, se introducirá la religión (Cristiana, por supuesto)como materia evaluable, y es que, como es sabido, la competencia en mitos u otras cuestiones metafísicas se ha revelado fundamental para encontrar un empleo. Y si se trata de avanzar en el conocimiento, ¡que inventen ellos!
ResponderEliminarYa van unas cuantas generaciones de universitarios perdidas y esto no se resuelve. Es una decisión dura cuando uno se plantea estudiar una ingeniería u otra carrera científica y sabe que, probablemente, su vida profesional nunca estará en su país de origen.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tienes toda la razón, gatoflauta... Nunca quieenes accedieron a posiciones de prebendas inmerecidas sentirán que deben hacer por otros... lo que ni ellos se merecen... el borrachuzo que se pulió a alguien en Cuba y que no tenía ni permisos y ganaba la friolera de unos 60:000 euros brutos de asesoe en la Comunidda de Madrid....
ResponderEliminar¡Ay!
Gustavo, a los veteranos (médicos: oncólogos como tu, disculpa el lapsus anterior) os queda, al menos, la demanada de Qatar... A los humanistas.. sniff, snifff...
ResponderEliminarBesos!